POLCA: Carta a mi dueña.
Querida Antonia:
el otro día vino a nuestra casa un coche con luces y sirenas que te llevó al hospital. Estuve mucho tiempo sola en casa esperando tu vuelta, pero no volviste.
Hoy me ha sacado de la casa en la que vivíamos las dos una persona, a la que hiciste prometer que si no volvías yo no acabaría en una perrera. Me han traído a su casa, es una familia apamaguera que tiene un perro que fue abandonado y me ha contado lo mal que se está solo en la calle, otro de